Todo sigue donde lo dejé

Escribir de algo en ocasiones tan anodino como el mundo del fútbol puede llegar a cansar. Se repiten los temas y cuesta sentarse delante del ordenador a escribir algo que parece que ya está dicho. Pero en fin, tras estas largas vacaciones llega el momento de coger con fuerza este final de temporada que se adivina apasionante. ¿No? Pues hay que ver lo que son las cosas, casi 4 meses sin escribir para el blog y ahora que se pone uno... todo sigue donde lo dejé.

Un ejemplo de ello es la prensa deportiva, con sus máximos exponentes viviendo aun en los Mundos de Yupi. Que decir de Diego Torres, empeñado en convertir el vestuario del Real Madrid en el escenario de una telenovela venezolana de toma pan y moja. En uno de sus últimos artículos, el inefable periodista de El País acusaba a Mourinho de arriesgar a Di María simplemente por que era su favorito. Si el Madrid gana 1-5 en un campo tan complicado como el Reyno de Navarra, lo más reseñable para el plumilla (este artículo) del Grupo Prisa es que "Las relaciones entre José Mourinho y el grupo de jugadores que se aglutinan alrededor de los españoles nunca fue tan tirante como en las últimas semanas". Drama, conflicto, luchas internas... En fin, que, como siempre, este muchacho parece tener línea directa con un vestuario que le sigue contando sus miserias para que las lea todo el mundo. Mientras, sus partes de guerra son exclusiva suya. Nada de lo que escribe puede leerse en ningún otro diario de España.

Por otra parte, al final el villarato ha calado a fondo en el imaginario colectivo. Gran éxito para Alfredo Relaño, al que se puede acusar de haber hecho el mundo un lugar un poquito peor para vivir. Ahora todo el mundo tira de teorías de la conspiración para explicar todas sus miserias futbolísticas, desde el presidente del Benfica ("no querían que pasásemos") hasta, sorpresa, la comunidad culé. Y es que mira que se reían del villarato hace un añito lo jodíos. Pues ahora encontramos artículos enteros sobre el villarato de marras en periódicos como Sport y Mundo Deportivo hablando de él con toda naturalidad. El único cambio, claro, es que es una conspiración en contra del Barça. Coherencia ante todo.

Y que decir de Mourinho y Guardiola, esos si que no han cambiado un pelo. Mourinho sigue tocando las pelotas siempre que puede: Con ironía cuando gana ("El Barça jugará la final, son muy buenos") y con rabietas de niño malcriado cuando no lo hace como tras el partido frente al Villarreal. Y el de Santpedor en su línea, esa en la que no dice nada pero lo dice todo. Como último ejemplo la contestación a Ibrahimovic: "Ibra puede decir lo que quiera sobre los árbitros y apoyar a su amigo Mourinho (...)  Los jugadores hablan en el campo, que es donde se tiene que hablar"... Menos mal que media plantilla del Barça no puso a parir al árbitro tras el partido de ida de cuartos en San Siro y Guardiola no lo ha hecho media docena de veces esta temporada.

¡Ah! Se me olvidaba. Por supuesto luego está la cuestión deportiva en la que, efectivamente, todo sigue igual. Madrid y Barça parecen jugar a otra cosa mostrando un nivel arrollador. Así las cosas, ambos parecen los máximos aspirantes a los títulos que quedan en juego esta temporada con permiso de Bayern (un coco), Athletic (excelso) y Chelsea. También hay que hacer mención a la gran campaña de Europa League que están haciendo los nuestros y, como no, a esa Eurocopa que se dibuja en el horizonte... Estos tres próximos meses van a ser apasionantes. Espero veros pronto por aqui.