Dicen que el cementerio está lleno de valientes y tal vez al Almería le ocurrió algo de eso en el partido de ayer.
Los almerienses plantearon un partido atrevido, intentando recuperar la pelota en campo contrario, pero los azulgranas no les concedieron ni la más mínima oportunidad.
No hay que olvidar que jugar contra un equipo como el Barça es muy difícil y hacen que elegir discurso sea casi imposible.
El Almería lo intentó y eligió no quedarse atrás, recuperar pronto y salir rápido y con criterio, y el resultado es un F.C. Barcelona que espera rival para la final.
Guardiola introdujo varios cambios en el equipo. Pinto ocupaba la portería, Maxwell y Adriano ocupaban los laterales y Abidal acompañaba a Piqué.
El resto fueron los de siempre, exceptuando a un Mascherano que sustituía a Busquets.
Como decíamos al principio, el Almería trató de plantar cara, pero cuando te marcan el primer gol en el minuto 8 poco se puede hacer.
Abría el marcador Messi tras una buena jugada personal de Pedro, que definía el futbolista argentino desde la frontal del área.
El segundo llegaba momentos después tras una salida rápida de Xavi que Villa finalizó de forma fantástica.
Minuto 11 y el partido y la semifinal eran ya completamente del Barça.
Cabe destacar que a partir de aquí la actitud del Almería, como es obvio, cambió totalmente.
Al verse superados por el conjunto catalán intentaron continuar con su planteamiento, ser fieles a su idea, pero les resultó francamente difícil crear peligro.
El Barça coronó esos quince minutos grandiosos con un gol de Messi que empezó en el área azulgrana.
Los catalanes dominan infinidad de registros, y el contragolpe es uno de ellos, por eso hablábamos de la dificultad que supone para el contrario elegir qué hacer.
Durante los quince minutos siguientes se dedicó a tocar tranquilamente la pelota, controlando el partido y esperando una oportunidad que les llegó en el 30.
Pedro remataba de cabeza un saque de falta de Xavi y marcaba el cuarto del equipo.
La primera parte moría con un disparo lejano de Crusat.
En la segunda parte los azulgrana trataron de absorber la posesión de balón con el fin de que los minutos fueran transcurriendo sin sobresaltos, y no hace falta apuntar que lo consiguieron.
Mascherano trataba de sumarse a la fiesta con un disparo desde fuera del área, mientras Goitom disfrutaba de la mejor oportunidad para su equipo al plantarse en solitario ante Pinto, aunque el disparo salió fuera.
El Barça coleccionaba ocasiones y Pep daba entrada a Afellay, Milito y Keita, y sería este último el que redondearía el resultado tras un pase espectacular, cómo no, de Messi.
Y así acabó otro partido ganado por la maquinaría azulgrana, que llega a los partidos de Champions en el mejor momento de la temporada.
Noventa minutos después, el Barça espera rival para la final.
Los almerienses plantearon un partido atrevido, intentando recuperar la pelota en campo contrario, pero los azulgranas no les concedieron ni la más mínima oportunidad.
No hay que olvidar que jugar contra un equipo como el Barça es muy difícil y hacen que elegir discurso sea casi imposible.
El Almería lo intentó y eligió no quedarse atrás, recuperar pronto y salir rápido y con criterio, y el resultado es un F.C. Barcelona que espera rival para la final.
Guardiola introdujo varios cambios en el equipo. Pinto ocupaba la portería, Maxwell y Adriano ocupaban los laterales y Abidal acompañaba a Piqué.
El resto fueron los de siempre, exceptuando a un Mascherano que sustituía a Busquets.
Como decíamos al principio, el Almería trató de plantar cara, pero cuando te marcan el primer gol en el minuto 8 poco se puede hacer.
Abría el marcador Messi tras una buena jugada personal de Pedro, que definía el futbolista argentino desde la frontal del área.
El segundo llegaba momentos después tras una salida rápida de Xavi que Villa finalizó de forma fantástica.
Minuto 11 y el partido y la semifinal eran ya completamente del Barça.
Cabe destacar que a partir de aquí la actitud del Almería, como es obvio, cambió totalmente.
Al verse superados por el conjunto catalán intentaron continuar con su planteamiento, ser fieles a su idea, pero les resultó francamente difícil crear peligro.
El Barça coronó esos quince minutos grandiosos con un gol de Messi que empezó en el área azulgrana.
Los catalanes dominan infinidad de registros, y el contragolpe es uno de ellos, por eso hablábamos de la dificultad que supone para el contrario elegir qué hacer.
Durante los quince minutos siguientes se dedicó a tocar tranquilamente la pelota, controlando el partido y esperando una oportunidad que les llegó en el 30.
Pedro remataba de cabeza un saque de falta de Xavi y marcaba el cuarto del equipo.
La primera parte moría con un disparo lejano de Crusat.
En la segunda parte los azulgrana trataron de absorber la posesión de balón con el fin de que los minutos fueran transcurriendo sin sobresaltos, y no hace falta apuntar que lo consiguieron.
Mascherano trataba de sumarse a la fiesta con un disparo desde fuera del área, mientras Goitom disfrutaba de la mejor oportunidad para su equipo al plantarse en solitario ante Pinto, aunque el disparo salió fuera.
El Barça coleccionaba ocasiones y Pep daba entrada a Afellay, Milito y Keita, y sería este último el que redondearía el resultado tras un pase espectacular, cómo no, de Messi.
Y así acabó otro partido ganado por la maquinaría azulgrana, que llega a los partidos de Champions en el mejor momento de la temporada.
Noventa minutos después, el Barça espera rival para la final.
3 comentarios:
Bienvenido Sancheski!!!
Lo mismo digo, bienvenido!
Muchas gracias a los dos por contar conmigo, espero estar a la altura ^^.
Publicar un comentario